Qué esperar de la primera sesión
Ajustando expectativas
Muchas personas sienten nervios o incluso vergüenza antes de acudir por primera vez al psicólogo. La incertidumbre sobre qué se va a hablar, cómo será el terapeuta o si “hay suficiente motivo” para ir puede generar dudas y resistencia. Es normal: abrirse sobre uno mismo a un desconocido no siempre resulta fácil.
En una primera sesión no se busca una solución inmediata, sino conocerte. El objetivo es comprender tu situación, cómo te afecta, tu historia y qué esperas del proceso. El psicólogo preguntará sobre tus motivos de consulta, tus emociones, tu contexto personal y aquello que te preocupa. No hay respuestas correctas ni incorrectas, solo un espacio seguro para empezar a ordenar lo que traes contigo y desde ahí poco a poco ir trabajando.
Desde la psicología hablamos de la importancia de la alianza terapéutica: la confianza que se crea entre paciente y terapeuta. Este vínculo profesional es uno de los mejores predictores del éxito de la terapia y se empieza a crear en esa primera sesión. Se trata de ver si te sientes escuchado, comprendido y cómodo para trabajar en equipo.
Cada persona avanza a su ritmo, pero la primera sesión suele dar un primer alivio: poner en palabras lo que llevabas dentro, con alguien que te escucha sin juicios para poder ayudarte de forma profesional en tu cambio.
Si estás pensando en dar ese paso, recuerda: no necesitas tenerlo todo claro para empezar. La terapia se construye poco a poco y el primer encuentro es solo la puerta de entrada.
Si quieres iniciar este camino, estaré encantado de acompañarte.